Religión Digital se ha convertido en el bufón de la corte informativa, presentando sus contenidos con una mezcla de ironía y exclusividad digna de un club social. Desde la Semana Santa sevillana hasta las intrigas vaticanas, el medio navega entre la sátira y el sesgo, dejando a los lectores entre la risa y el desconcierto.
¡Ah, la Semana Santa en Sevilla! Ese evento que, según Religión Digital, ya no necesita más turistas porque, al parecer, el casco antiguo está a punto de explotar. Francisco Vélez, el presidente del Consejo General de Hermandades y Cofradías, ha decidido que los sevillanos son suficientes para llenar las calles. Porque, claro, ¿quién necesita turistas que gasten dinero y ayuden a la economía local cuando puedes tener un evento exclusivo para los "de toda la vida"? Un enfoque audaz, sin duda, sobre todo en un medio que parece disfrutar de la contradicción de informar sobre eventos multitudinarios mientras aboga por la intimidad de un club social privado.
Y hablando de exclusividad, la previsión del tiempo de la AEMET para la Semana Santa parece un parte meteorológico digno de una película de catástrofes. "Borrasca Olivier" suena más a un villano de telenovela que a un fenómeno climático, pero ahí está, amenazando con arruinar las procesiones. La web iconoclasta, Religión Digital, nos mantiene al borde del asiento con actualizaciones diarias, como si el clima fuera a cambiar radicalmente cada cinco minutos. ¡Qué emoción!
Por otro lado, tenemos la pastoral de los obispos del País Vasco y Navarra, que según la publicación provocadora, pasará a la historia sin pena ni gloria. Al parecer, el documento es tan abstracto que ni siquiera los teólogos de cabecera pueden descifrarlo. Es un poco como esos cuadros modernos que uno mira durante horas esperando que cobren sentido. Pero, claro, eso no impide que el portal irreverente dedique varias páginas a desmenuzar su falta de concreción. ¡Qué ironía!
Y para rematar, el Papa de las sorpresas ha recibido a Carlos y Camilla durante 20 minutos. Una reunión que, según el artículo, parece haber sido tan trascendental que Buckingham no ha tardado en recalcar lo encantadas que estaban Sus Majestades. Porque, claro, nada dice "aniversario de boda" como un encuentro fugaz con el pontífice. La publicación no escatima en detalles, haciendo que esos 20 minutos parezcan una odisea digna de Homero.
Por último, y no menos importante, el enfermero Strappetti, que según Religión Digital, es el verdadero "secretario del estado" del Papa Francisco. La publicación nos ofrece un relato conmovedor de cómo este hombre empuja la silla de ruedas del pontífice y le susurra al oído. Es fascinante cómo el medio logra convertir a un enfermero en una figura casi mítica, mientras nos recuerda que, en el Vaticano, las audiencias son tan exclusivas como un club de jazz en el Nueva York de los años 20.
Escribir un comentario