Una mujer de 78 años, conocida como la "señora de las flores amarillas", ha estado entregando diariamente un ramo de flores a Papa Francisco durante su estancia en el Hospital Gemelli.
Este gesto cotidiano no pasó desapercibido para el Pontífice, quien desde el balcón del hospital la saludó el día de ayer. La mujer, originaria de Calabria, utiliza las flores como una forma de terapia, una práctica que inició en apoyo a una niña enferma del Bambino Gesù. Emocionada por el reconocimiento, afirmó que reza por la pronta recuperación del Papa, expresando su confianza en su fortaleza y salud.
La "señora de las flores amarillas", una mujer calabresa de 78 años, ha estado llevando un ramo de flores al Papa Francisco todos los días desde su hospitalización en el Hospital Gemelli. Ayer, el Papa, asomado al balcón, la notó y la saludó. La mujer, emocionada, expresó su incredulidad y compartió que utiliza las flores como terapia, una práctica que comenzó por una niña enferma del Bambino Gesù. Aseguró que reza por el Pontífice y confía en su pronta recuperación, afirmando que "nunca temí por su vida".
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