Cientos de miles de jóvenes católicos se han reunido en Roma para participar en el Jubileo de los Adolescentes, un evento convocado por el Papa Francisco.
Entre los asistentes, más de 200 adolescentes de la Archidiócesis de Madrid han viajado hasta la Ciudad Eterna. Este encuentro, que inicialmente tenía como objetivo la canonización de Carlo Acutis, se transformó en una experiencia espiritual única al coincidir con el funeral del Papa. Durante el fin de semana, los jóvenes participaron en la Misa jubilar presidida por el cardenal Pietro Parolin en la plaza de San Pedro, donde la ausencia del Papa Francisco se sintió profundamente. A pesar de ello, los adolescentes vivieron momentos de intensa espiritualidad y comunidad, destacando el paso por la Puerta Santa como un gesto significativo de fe y renovación.
Cientos de miles de jóvenes se han congregado en Roma para el Jubileo de los Adolescentes convocado por el Papa Francisco. Entre ellos, más de 200 adolescentes de la Archidiócesis de Madrid. Laura Moreno, delegada de los jóvenes, destaca que, aunque llegaron para la canonización de Carlo Acutis, se encontraron velando el cuerpo del Papa en su funeral. Esta experiencia ha sido descrita como un momento de profunda espiritualidad y comunidad.
Cruz, de 14 años, y Gonzalo, de la parroquia de Santa Rita, compartieron sus impresiones sobre el evento. Cruz decidió participar en el jubileo a pesar de tener otros planes, mientras que Gonzalo se sintió emocionado durante la Misa jubilar. La ausencia del Papa Francisco en la Eucaristía del domingo en la plaza de San Pedro dejó una sensación de nostalgia. Pietro Parolin, quien presidió la ceremonia, destacó la alegría pascual reflejada en los rostros de los jóvenes.
Los adolescentes madrileños, conscientes de vivir un momento histórico, han experimentado sentimientos encontrados al despedir al Papa en un fin de semana que debía ser de alegría. José Luis Cerutti, parte del equipo acompañante, describe el evento como un fin de semana atípico, vivido con alegría y profundidad. La experiencia ha sido un verdadero regalo para los jóvenes, quienes han encontrado en estos días una oportunidad única de crecimiento espiritual.
Tras la Eucaristía, los jóvenes atravesaron la Puerta Santa, un gesto significativo del pontificado de Francisco. Gonzalo destacó la singularidad de este momento, vivido con recogimiento y oración. El cardenal Cobo acompañó a los jóvenes, quienes también se preparan para un encuentro con el arzobispo de Madrid. Laura Moreno subraya la importancia de estos momentos compartidos, que han sido un verdadero regalo para todos los participantes.
José Luis Cerutti resume la experiencia de los jóvenes en Roma como un tiempo para vivir la Iglesia, agradecer la vida del Papa Francisco y celebrar la alegría de Cristo resucitado. Aunque el Papa Francisco no estuvo presente físicamente, su espíritu y legado han acompañado a los jóvenes en este Jubileo de los Adolescentes, marcando una experiencia inolvidable para todos los participantes.
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