Narciso Dols Morales, sacerdote diocesano y canónigo de la Santa Iglesia Catedral de Murcia, falleció ayer a los 97 años en Murcia, coincidiendo con la celebración de la Vigilia Pascual.
Sus restos están siendo velados en el Tanatorio de Jesús de Espinardo, y la misa de exequias, que será presidida por el obispo de Cartagena, se llevará a cabo mañana, Lunes de Pascua, a las 10:00 horas en la Catedral de Murcia. Nacido en El Raal, Murcia, Dols fue ordenado sacerdote en 1953 y desempeñó diversos cargos pastorales en la diócesis, incluyendo el de canónigo magistral de la catedral desde 1976. Además, tuvo un papel destacado en servicios diocesanos, siendo viceconsiliario y consiliario de Acción Católica, profesor de Teología Dogmática y miembro de varios consejos y comisiones diocesanas.
Narciso Dols Morales, sacerdote diocesano y canónigo de la Santa Iglesia Catedral de Murcia, falleció ayer en Murcia a los 97 años, coincidiendo con la celebración de la Vigilia Pascual. Sus restos están siendo velados en el Tanatorio de Jesús de Espinardo, y la misa de exequias será presidida por el obispo de Cartagena mañana, Lunes de Pascua, a las 10:00 horas en la Santa Iglesia Catedral.
Nacido en El Raal, Murcia, el 20 de octubre de 1927, Narciso Dols fue bautizado en la Parroquia Nuestra Señora de los Dolores el 5 de noviembre de 1927. Ingresó en el Seminario San Fulgencio en 1940, donde completó estudios de Humanidades y Filosofía. Posteriormente, se trasladó a la Universidad de Comillas en Santander, donde obtuvo la licenciatura en Teología y Derecho Canónico. Fue ordenado sacerdote en Comillas el 13 de julio de 1953.
Tras su ordenación, Dols desempeñó diversos cargos pastorales en la Diócesis. Fue coadjutor en la Parroquia la Purísima de Yecla, cura regente en la Parroquia Nuestra Señora de Cortes de Nonduermas y cura ecónomo en varias parroquias de Murcia y Cieza. Desde 1976, fue canónigo magistral de la Catedral de Murcia, y en 2011 se convirtió en canónigo magistral emérito. Además, ejerció como cura párroco de San Miguel Arcángel de Murcia entre 1987 y 2002.
El sacerdote también tuvo un papel destacado en diversos servicios diocesanos. Fue viceconsiliario y consiliario de los hombres de Acción Católica, profesor de Teología Dogmática y miembro de múltiples consejos y comisiones diocesanas. Entre sus cargos, se incluyen el de juez pro-sinodal, fiscal de la Audiencia Episcopal y defensor del vínculo en el Tribunal Eclesiástico Diocesano. Además, fue capellán de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús y consiliario del Cabildo Superior de Cofradías.
Escribir un comentario