El Papa Francisco, representado por el cardenal Leonardo Sandri, hizo un llamamiento a la solidaridad durante la Misa del Domingo de Ramos el pasado domingo en la Plaza de San Pedro, en el Vaticano.
En la homilía leída por Sandri, el Pontífice instó a los fieles a "tender la mano al que ya no puede más", subrayando la importancia de apoyar a quienes enfrentan situaciones difíciles. La ceremonia, que marca el inicio de la Semana Santa, reunió a numerosos creyentes en un acto de reflexión y fe. El mensaje del Papa enfatizó la necesidad de compasión y solidaridad en tiempos de adversidad, invitando a la comunidad católica a ser un refugio para los más necesitados. Este llamado a la empatía y generosidad resuena en un contexto mundial de desafíos económicos y sociales.
El Papa Francisco, a través de una homilía leída por el cardenal Leonardo Sandri, hizo un llamamiento a la solidaridad durante la Misa del Domingo de Ramos celebrada en la Plaza de San Pedro. En su mensaje, el Pontífice instó a los fieles a "tender la mano al que ya no puede más", enfatizando la importancia de apoyar a quienes enfrentan situaciones difíciles. La ceremonia, que marca el inicio de la Semana Santa, congregó a numerosos creyentes en un acto de reflexión y fe.
La homilía del Papa subrayó la necesidad de compasión y solidaridad en tiempos de adversidad, invitando a la comunidad católica a ser un refugio para los más necesitados. El cardenal Sandri, encargado de presidir la misa, transmitió las palabras del Papa, destacando la relevancia de actuar con empatía y generosidad. Este mensaje resuena especialmente en un contexto mundial donde muchas personas enfrentan desafíos económicos y sociales significativos.
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