Retiro espiritual en San Pedro del Pinatar reúne a laicos de Cartagena y Madrid La Acción Católica General (ACG) de la Diócesis de Cartagena, en colaboración con la Vicaría para la Evangelización, organizó un retiro espiritual para laicos bajo el lema "De la cruz a la luz, el misterio pascual en nuestras vidas".

El evento se llevó a cabo el pasado fin de semana en la Casa de Oración Virgen del Mar, situada en Lo Pagán, San Pedro del Pinatar. Un total de 28 participantes de diversas parroquias de la Diócesis de Cartagena, así como de Madrid y Almería, asistieron a esta actividad. El objetivo del encuentro fue fomentar el crecimiento y maduración en la fe de los laicos mediante la oración personal y el desierto espiritual. Según Fernando García Sanz, presidente de ACG en la Diócesis de Cartagena, los asistentes experimentaron un clima de hermandad mientras reflexionaban sobre sus soledades y heridas, y buscaban la respuesta de Cristo ante sus adversidades.

Bajo el lema "De la cruz a la luz, el misterio pascual en nuestras vidas", la Acción Católica General (ACG) de la Diócesis de Cartagena, en colaboración con la Vicaría para la Evangelización, organizó unos ejercicios espirituales dirigidos a laicos. El evento tuvo lugar el pasado fin de semana en la Casa de Oración Virgen del Mar, ubicada en Lo Pagán, San Pedro del Pinatar. Esta actividad forma parte del proyecto de ACG para fomentar el crecimiento y maduración en la fe de los laicos.

Un total de 28 participantes provenientes de diversas parroquias de la Diócesis de Cartagena, así como de Madrid y Almería, asistieron a estos ejercicios. Según Fernando García Sanz, presidente de ACG en la Diócesis de Cartagena, los asistentes pudieron experimentar "un clima de hermandad". La actividad se centró en la oración personal y el desierto espiritual, permitiendo a los laicos buscar y reconocer sus soledades y heridas, y reflexionar sobre la respuesta de Cristo ante las adversidades.

La iniciativa de ACG busca ofrecer a los laicos un espacio para su desarrollo espiritual, promoviendo un proceso de crecimiento en su fe. Los ejercicios espirituales se presentan como una oportunidad para que los participantes fortalezcan su relación con Dios, apoyándose en la comunidad y en la guía espiritual proporcionada durante el evento. La experiencia ha sido valorada positivamente por los asistentes, quienes destacaron el ambiente de recogimiento y reflexión vivido durante el fin de semana.

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