La Iglesia de Madrid ha lanzado un nuevo Plan Pastoral con las Personas Mayores, una iniciativa que busca incrementar la participación de los ancianos en la vida eclesial.
La presentación, que tuvo lugar en los salones parroquiales de Nuestra Señora del Buen Suceso, fue liderada por el cardenal José Cobo, arzobispo de Madrid. Este proyecto surge como respuesta al desafío de la soledad no deseada que enfrentan muchos ancianos, y tiene como objetivo no solo proporcionarles atención, sino también reconocer y potenciar su rol como laicos comprometidos y agentes de pastoral. Durante el evento.
La Iglesia de Madrid ha presentado su nuevo Plan Pastoral con las Personas Mayores, una iniciativa que busca potenciar el protagonismo de los mayores en la vida eclesial. La presentación tuvo lugar en los salones parroquiales de Nuestra Señora del Buen Suceso y, debido a la gran afluencia de personas, se trasladó al templo, donde el aforo estuvo completo, reflejando el interés y la implicación de los mayores en la vida de la Iglesia.
El cardenal José Cobo, arzobispo de Madrid, destacó la importancia de este proyecto y subrayó que la presencia de los mayores en la Iglesia madrileña es muy significativa. El arzobispo enfatizó que el papel de los mayores va más allá de la atención social: "No partimos de cero. Desde la Pastoral de la Salud y desde Cáritas siempre ha habido una atención específica a los mayores. Pero ahora damos un paso más: no solo se trata de atenderlos, sino de potenciar su protagonismo como laicos comprometidos y agentes de pastoral".
El cardenal Cobo también se refirió a uno de los grandes desafíos actuales: la soledad no deseada. En este sentido, afirmó que "en una ciudad como Madrid, la lucha contra la soledad es muy importante. Hay que acompañar a quienes están solos, pero también reconocer el papel de los mayores como transmisores de la fe. En nuestra Iglesia, en todo momento, la transmisión de la fe ha sido de generación en generación y es algo que no podemos renunciar, es una llamada que tenemos y nos tenemos que hacer cargo de transmitir la fe a las nuevas generaciones".
Otro punto clave de la intervención del arzobispo fue la necesidad de coordinar esfuerzos en toda la diócesis: "No empezamos de cero, pero debemos unir fuerzas. No queremos una pastoral donde solo demos cosas, sino una en la que los mayores se sientan protagonistas. La Iglesia es misionera y en esta tarea vosotros sois clave".
El Plan Pastoral con las personas mayores busca reforzar la presencia activa de este colectivo en la vida eclesial, promoviendo su papel como testigos y misioneros, fomentando interacciones activas y reconociendo su labor en la transmisión de la fe y en la memoria de las parroquias.
Tras el discurso del cardenal Cobo, tuvo lugar la charla de José Ignacio Figueroa, consiliario nacional de Vida Ascendente, que presentó la parroquia como "posada del buen samaritano", refugio y acogida, espacio de sanación y hospitalidad. A continuación, Carlos Rivas, coordinador de la Comisión Diocesana de la Pastoral con las Personas Mayores, presentó los tres objetivos de esta pastoral.
Finalmente, Mar Crespo, de Cáritas Diocesana de Madrid, presentó la iniciativa del Teléfono de Escucha a personas mayores en soledad, un servicio llevado a cabo por un grupo de voluntarios dedicados a atender cualquier necesidad que se presenta.
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